Miss "Cara de Pan de Leche"

Tenía un profesor de cine en la Universidad que decía que Meryl Streep tenía "cara de pan de leche". El profesor era sudamericano, para más señas, pues aquí no sabemos muy bien que cara tiene el pan de leche. Sólo decimos eso de "tienes cara de pan", pero creo que mi profesor se refería a otra cosa... Se refería, quizás, a esa cara un poco hervida, siempre a punto para un sollozo o una lágrima sobrera.
Todo hay que decir que yo iba a la Universidad entre finales de los ochenta y principios de los noventa, justo en la época en la que decir que te gustaba Meryl Streep (a mi me gustaba, y me sigue gustando) estaba mal visto. Hacer una declaración de principos como esa era casi sinónimo de no estar a la última, de ser un "ñoño", un sensiblero o algo aún peor. Vamos, un antiguo.


Es sin duda la única actriz de su generación (en el apartado masculino estarían Jack Nicholson, Al Pacino, Robert De Niro, Chistopher Walken...) que se ha mantenido siempre en lo alto, desafiando la edad (está rondando los sesenta), las modas y los caprichos de la industria. Quizás Susan Sarandon, Jessica Lange o Michelle Pfeipfer podrían decir algo parecido, aunque lo cierto es que se prodigan menos y alguna incluso ha tenido que retirarse largas temporadas por falta de buenos papeles.
Este es, pues, un post reivindicativo, impetuoso y no preparado que se me ha ocurrido al leer la crítica de "Expediente Anwar", en la que -como siempre- lo mejor de la película sigue siendo su aparición... ¡Qué curioso! Los mismos críticos que le ponían "cara de pan de leche", ahora se arrodillan ante su talento. El tiempo lo pone todo en su sitio... e interpretaciones como las de "Los puentes de Madison" o "Las horas" son ahora absolutamente indiscutibles.

Etiquetas: Cinema
2 Comments:
A mí ella me encanta y en mi recuerdo siempre ha sido muy buena y respetada para todo el mundo. A mí a finales de los ochenta, principios de los noventa me gustaba Peter Sellers, Los mundos de Yuppy, Jerry Lewis, He-man, Cary Grant y Tutti-frutti. Creo que no conocía todavía a Meryl. Pero hay cosas que vale la pena ver después con cierta distancia.
Pues lo que digo es bien cierto, y mi generación lo sabe muy bien. Fue muy menospreciada durante años, sin razones demasiado fundamentadas, y ahora muchos han tenido que tragarse sus palabras... Críticos incluidos.
Es curioso que te gustase Cary Grant a finales de los ochenta. Muy curioso. Jajajaja... Por cierto, en mi próximo post hablaré de él.
Besos para Escocia.
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